Hace no mucho nos comentaba un cliente las bondades de los emisores térmicos wifi, que venimos vendiendo desde hace un par de años, sin ser, curiosamente nuestro top ventas en radiadores eléctricos (Avant Touch). Éste amigo de la casa, compró en su día, junto a su mujer un bonito apartamento de esquí en Panticosa, muy cerquita de Sallent de Gállego y Formigal.
Como muchas de las viviendas de esquí que se adquieren estaba amueblada con muebles de pino cuando la adquirió, y quiso amueblarla con estilo y gusto sin recargarla y bajo una línea minimalista y práctica.
Fue ahí cuando lo conocimos, pues él sabía que no quería radiadores tradicionales para el pequeño apartamento pero que tampoco podía permitirse los radiadores que le recomendó su amigo el arquitecto, una marca que empieza por R y que tiene radiadores que valen sin pestañear 3.000 Euros. Y ahí empezó una bonita historia como un prejubilado cuyo sueño era esquiar con su mujer cada vez que el clima se lo permitiera. De forma que nos hizo participes en su reforma, en sus elecciones, en los materiales, en los colores de las estancias, hasta que ambas partes descubrimos que lo mejor encajaba en ese hogar tan especial eran radiadores Wifi, para que justo para que antes de salir de viaje hacia Panticosa, nuestro protagonista pudiera encender a distancia los radiadores desde Asturias y mediante su móvil.
¡Qué agradable es llegar a las 11 de la noche a Huesca, a tu pequeño apartamento, abrir la puerta y que esté ya calentito, listo para acogerte!.
Y así pasó el tiempo, en concreto no más de un año, hasta que nuestro amigo nos volvió a llamar. Esta vez no era solo para añadir un toallero sino para darle más prestaciones a su apartamento pues no tenía otra alternativa que convertirlo en apartamento turístico. Y es que, a su mujer, un pequeño accidente doméstico, la había dejado muy lejos de cualquier pista de esquí ….
Aunque nos dió mucha pena que después de tanto mimo en amueblarlo y decorarlo, el apartamento fuera a ser gestionado turisticamente, nos encanta saber cómo sincroniza las entradas y salidas de nuestro apartamento con los encendidos y apagados de los radiadores desde su Asturias natal y es que nadie cuida tanto una casita como su dueño: Los turistas entran y salen sin caer en la cuenta de lo que puede dispararse el recibo de la luz si toda la jornada de esquí los equipos quedan enchufados a “todo trapo”. Por eso nuestro querido Pedro, los apaga desde la App cuando sabe que están malgastando recursos o les reduce potencia.
Ahora, aunque sigue a la espera de que su mujer se recupere deja que mientras, otros disfruten de ese apartamento decorado con tanto cuidado, a la espera de que ellos puedan volver los fines de semana la época invernal a disfrutar de los paisajes de Lanuza y alrededores al calor de nuestros equipos Climastar.